Experiencias de las Prácticas Profesionales. Por Dalia Palacios.

EXPERIENCIAS DE LAS PRÁCTICAS PROFESIONALES.
Por Dalia Palacios. Alumna de séptimo semestre de la LIE-EDUCACIÓN INCLUSIVA
UNIDAD UPN 121, CHILPANCINGO, GUERRERO.
DICIEMBRE DE 2005.

La estructura curricular de la LIE requiere que el estudiante se acerque a los posibles ámbitos de intervención establecida por la propia Licenciatura, por eso la exigencia de que llevemos a cabo Prácticas Profesionales, que sean consideradas como actividades de carácter formativo que se realicen fuera de la institución, con la firme intención de ampliar, aplicar y consolidar las competencias desarrolladas a través de los cursos de las áreas de formación inicial, en ciencias sociales, en educación y en las líneas especificas.

En las Prácticas Profesionales nos acercamos con la supervisión de un especialista a determinados procedimientos de intervención sobre la realidad en el campo de formación profesional y pueden desarrollarse en instituciones educativas, organismos no gubernamentales, empresas, etc, inician cuando hayamos adquirido competencias que nos permiten observar, diagnosticar y sistematizar información contextual a la par de elementos teóricos y metodológicos para diseñar y ejecutar proyectos de intervención de acuerdo al contenido de cada línea especifica en este caso la Educación Inclusiva.

Tienen una duración de 180 horas, cubriéndose durante los tres últimos semestres, puede ser a lo largo del semestre o de manera intensiva. El desarrollo será de acuerdo a las siguientes competencias:
  • 6º. Semestre: Observar, identificar y caracterizar problemas, procesos y actores.
  • 7º. Semestre: Elaborar diagnósticos sobre situaciones problemáticas para diseñar las estrategias de intervención.
  • 8º. Semestre: Elaborar y evaluar proyectos de intervención.

Actualmente estando cursando el séptimo semestre de la LIE es una experiencia muy grata el llegar a la escuela y que los niños te reciban con mucho cariño es algo que no cambias por nada, pero también es una gran responsabilidad y un compromiso enorme por que el conocer y ayudar a niños con problemas de aprendizaje ha llegado a convertirse en uno de los mayores retos que podemos enfrentar, muy especialmente en nuestra sociedad actual, la cual muchas veces considera que la preparación académica es una forma segura de elevar el nivel de vida personal y que por lo mismo un alumno que no logra el máximo aprovechamiento en la escuela es posible que nunca pueda alcanzar un futuro auténticamente promisorio.

Como Interventores Educativos pretendemos que los niños desarrollen sus habilidades y actitudes con el fin de darles la mejor atención posible dentro de la escuela, también reconocer a la diversidad como una condición presente en cualquier grupo escolar, esto es, los niños presentan características distintas de acuerdo con su desarrollo y los contextos de donde provienen, actualmente el reconocimiento de la diversidad representa un reto, ya que para satisfacer las necesidades educativas de todos los alumnos, se realiza un esfuerzo continuo por conocer a cada uno de los niños y tener sensibilidad para apoyar a aquellos que, por diversas razones, presenta necesidades educativas especiales.

La identificación temprana de los niños que presentan necesidades especiales es importante para su futuro desarrollo, es por eso que se necesita de la observación cotidiana y del conocimiento integral que se tiene del grupo para detectar a estos alumnos.

Ahora comprendo que los niños con problemas de aprendizaje no están perturbados emocionalmente, no son retrasados mentales, simplemente no aprenden como los niños ciertas tareas básicas y especificas relacionadas con el desarrollo intelectual y los aspectos académicos, van mal o muy mal en la escuela, los maestros se quejan por su falta de aprovechamiento y los padres se desesperan.

Los niños con problemas de aprendizaje son niños excepcionales que requieren atención excepcional, ya que se trata de seres humanos con rasgos físicos, características mentales que difieren significativamente de los de la mayoría de cualquier población determinada.

Son muchos los casos de escolares que hacen grandes esfuerzos y su trabajo es aceptable en algunas asignaturas, su trato es agradable y se llevan bien con sus compañeros; pero son incapaces de deletrear, invierten letras, confunden las palabras.

Tenemos en nuestras manos un gran compromiso pero no solamente nosotros, sino todos aquellos que están involucrados en el desarrollo del niño como lo es la escuela, junto con la familia y el entrono social, hacer que la sociedad se involucre y contribuya con todo su interés, esfuerzo y energía para apoyar acciones que beneficien a todos los niños con necesidades especiales.

Se requiere de un mayor compromiso, con la plena convicción de que toda ayuda no solamente es bienvenida, sino necesaria para incorporarnos e integrarnos con menos dificultades de las que hoy enfrentamos.

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